“Es más fácil crear un hijo fuerte que reparar un adulto roto.” Frederick Douglas
“Los niños son el recurso más importate del mundo y la mejor esperanza para el futuro» John Fitzgerald Kennedy
“La educación es el arma más poderosa que podemos usar para cambiar el mundo” Nelson Mandela

“Herencia” Grafito sobre papel Basik, 150 gr., 70x100 cm.
“Herencia” Grafito sobre papel Basik, 150 gr., 70×100 cm.

Interiozar y tratar de poner en práctica estas tres frases es bajo mi punto de vista, el ingrediente que le falta a nuestra sociedad para vivir en un mundo donde la igualdad no sea un debate si no un hecho y la violencia de género una lacra puntual y no un motivo de movilización masiva. Si desde el principio ofrecemos a los más pequeños una base donde el amor, el respeto, la igualdad y el diálogo sean lo cotidiano, crecerán con una fuerte autoestima y una excelente educación en valores que dificilmente podrá verse menguada.
Debemos conseguir que las nuevas generaciones sean mucho más fuertes y respetuosas, más sanas a nivel emocional y crecerán en un mundo donde las barreras que encuentren no sean obstáculos insalvables, si no desafíos que superar. Donde no baste con ser igual, si no que de una vez por todas consigamos sentirlo. Un mundo donde se eduque en igualdad desde casa, donde deben encontrar el más claro ejemplo.

En la actualidad somos conscientes de lo que nos sobra, de lo que nos falta y de que los tiempos han cambiado. Tal vez no podamos convertir en buenos a los malos, ni conseguir que «desaprenda» la gente que ha sido educada bajo otros valores, lo que sería reconfigurar sus bases, pero todavía estamos a tiempo de cambiar el futuro.

Con esta obra no trato de hacer un llamamiento a la maternidad ni a la lactancia. Todos somos educadores aunque no seamos padres y debemos saber que tenemos en nuestras manos una gran responsabilidad. Leí hace tiempo algo que se me quedó grabado: «Educar es más difícil que enseñar. Para enseñar se necesitar saber, pero para educar se necesita ser. »

Mi dibujo muestra tan solo una escena. Una de las innumerables maneras que creo que puede valer como ejemplo de vínculo, de formas de fortalecer a un niño desde su fase más temprana cuando todavía cuando nos comunicamos con ellos por contacto físico, por gestos, por miradas…Cuando aún no entró en juego el significado de las palabras si no el tono de nuestra voz. Cuando todavía no se nos ha etiquetado por nuestro género, raza, condición social, fortalezas o debilidades. Cuando una madre no piensa que exista nada imposible para la criatura que está amamantando. Dicen que quien educa con amor educa para siempre. Yo trato de hacerlo a diario para que mis hijas vivan y contribuyan a crear un mundo mejor y espero que esa sea mi mejor y más valiosa «HERENCIA»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *