
No me salen las palabras acertadas para explicar correctamente lo que me he divertido pintando este cuadro. Debería decir que ha sido una experiencia enriquecedora, bonita, diferente y demás adjetivos que «mi yo interior» diría con voz de pito y terminando con una burla tipo «mimmimimi», pero lo que en realidad pensaba e incluso verbalizaba cada vez que miraba casi de manera obsesiva el proceso era un: Hostia puta! Sin más…
Lo siento. Sé que no es elegante ni artístico pero para mi ha sido una experiencia brutal. Me he dejado llevar por el instinto hasta este punto y aunque esté mal decirlo, estoy bastante orgullosa del resultado. Es un pop-art venido a más o un realista venido a menos, y como a parte de ser autodidacta soy una ignorante, no sabría ni cómo catalogarlo. Para mí es un trampantojo..y punto!

La historia de este cuadro comienza el 10 de abril, el día después de mi cumple. Tenía seis lienzos nuevos y seis ideas que me apetecían mucho adjudicadas, pero antes de meterme con otro cuadro «serio», quería relajarme con una de mis tontunas rápidas a lápiz, así que navegando por Google buscando todo y nada, una imagen llevó a otra y al final me topé con ésta, y cual acosadora de película, no paré hasta conseguir el teléfono del dueño (Jordi de @under_skin_tattoo_bcn) y contactarle para pedirle permiso para pintarla y…la respuesta obviamente fue positiva! Desde el 11 de abril me puse manos a la obra y…hasta hoy!
Para mi este cuadro es la suma de muchas cosas. Es fusión. Un examen final. Avance. Me siento tan asustada como feliz!
A lo mejor os sorprende que lo que en realidad me cautivó de esta imagen es que cuando la vi, pensé que era lo más coherente que había visto en mi vida. Dos personas reales, acordes y consecuentes. Vidas unidas por la tinta: «Ink Life»
Un comentario en “«Ink Life»”